Un día en el kínder
Los niños que asisten al kínder son seguros de sí mismos y conscientes de su entorno.
En Lighthouse promovemos su desarrollo emocional a través de la libertad de expresión, así como un reconocimiento de sus capacidades y las de sus compañeros. De esta manera, inspiramos a nuestros alumnos a ser la mejor versión de ellos mismos.
Para nosotros es muy importante que el entorno en el kínder sea el adecuado y les brinde seguridad, para que así se promueva su desarrollo emocional, intelectual y físico. Si se tiene un ambiente escolar cálido y sano, los niños reconocerán su cuerpo y su espacio, tendrán resiliencia, serán capaces de enfrentarse a adversidades, se adaptarán a nuevas circunstancias y generarán empatía con sus compañeros.